General Lamadrid 3 – Villa Dálmine 0
Dálmine llegaba a Devoto sabiendo que jugaba un partido clave para sus inspiraciones, sin embargo se quedó con las manos vacías y ahora el sueño del campeonato depende de un milagro. El partido fue totalmente desprolijo, en una cancha en pésimas condiciones donde en ningún momento se pudo jugar la pelota al piso, imperaron los pelotazos y mucha pierna fuerte.