Gran victoria de Villa Dálmine en Pilar, en un partido que podría haber goleado, pero despilfarró una gran cantidad de chances y terminó sufriendo en el final.
Quedó inconcluso, el partido entre Dálmine y Midland no pudo terminar debido a la intensa lluvia que desató en el inicio del segundo tiempo y que en pocos minutos tapo de agua el sector más próximo a los bancos de suplentes, y a los 24’ el árbitro Ángel Bracco decidió suspenderlo.
Una vez más el Viola vuelve a quedar en deuda. En un partido donde pudo haber sido para cualquiera de los dos el empate fue lo más justo, aunque debería haber sido al menos con un gol para cada equipo. Ambos tuvieron chances claras, pero no supieron definirlas y el cero en los arcos terminó siendo el resultado final.