Unión de Mar del Plata 1 - Villa Dálmine 3
 |
| Ezequiel Cérica anota el primer gol de Villa Dálmine en el inicio del segundo tiempo. |
Villa Dálmine lo perdía luego de un mal primer tiempo pero en el segundo se destapó y lo dio vuelta para quedarse con los tres puntos en Mar del Plata. Ezequiel Cérica, Renso Pérez de penal y Nazareno Solís anotaron los goles violetas para el 3 a 1 sobre Unión.
Cuando Gerardo Méndez Castro marcó el final en el estadio mundialista José María Minella, Villa Dálmine no sólo fue un racimo de jugadores fuertemente abrazados, sino también un grito de desahogo. Porque volvió a ganar como visitante tras siete encuentros sin poder hacerlo en esa condición y, sobre todo, porque se sacó de encima esa actuación en falso que había tenido en su propia casa ante Sportivo Belgrano. Una actuación que había dejado también varias dudas.
"Este grupo siempre se levantó de derrotas como éstas", había remarcado Renso Pérez tras ese encuentro. Y tenía razón. El sábado, en Mar del Plata, este equipo volvió a dar muestras de ello. Y con valor agregado: porque no sólo jugó un gran partido, sino que además debió revertir un marcador que ya le era adverso a los 9 minutos. Pero con intensidad, convicción y rendimientos individuales muy altos, Villa Dálmine terminó venciendo 3-1 a Unión y quedándose con un triunfo muy necesario y de alto valor tanto estadístico como anímico.
En el inicio del partido, con un 4-3-3 bien marcado, con Nouet y Solis abiertos a los costados y Cérica peleando todo por el centro, Villa Dálmine intentó ser protagonista. Y rápido, a los 2 minutos, generó su primera aproximación tras un recupero de Falcón y una posterior corrida de Solís. Sin embargo, cuando ambos todavía se estaban acomodando, el Violeta no pudo salir limpio de un tiro de esquina en defensa y el balón le quedó a Nicolás Ramírez, quien lanzó un centro justo para el central Leonel Formaggioni, que todavía andaba por el área y aprovechó para liquidar a Kletnicki con un cabezazo impecable.
La desventaja golpeó anímicamente al equipo de Sergio Rondina. Y por eso aparecieron algunas imprecisiones propias de los nervios y el apuro por ir a buscar el área rival. Pero eso duró apenas algunos minutos, porque Unión se retrasó demasiado y el Violeta no sólo comenzó a dominar el balón, sino también a mandar territorialmente. Entonces, desde los 15 minutos, el partido transcurrió casi en su totalidad en campo del local. Y preferentemente sobre el sector que defendía Peirone, por donde se movía Núñez, por donde se abría Nouet y hacia el que se volcaba Cérica con sus diagonales a espaldas de la última línea.
Igual, a Villa Dálmine le costó mucho transformar ese dominio en situaciones claras de gol. Núñez no pudo aprovechar un tiro libre desde una peligrosa posición y, en la más clara, Cérica definió desviado, de zurda, tras una guapeada que le había permitido quedar de frente al arquero Losada en el punto penal.
Unión, por su parte, apenas si apostaba a largos bochazos para la dupla Albarracín-De Franceso, quien inventó la única situación para el Celeste con una volea de zurda que salió cruzada y apenas ancha.
En la segunda parte, Rondina mandó a Solís a jugar sobre el flojo Peirone, quien tenía problemas para defender el lateral derecho. Y ahí se empezó a construir la levantada Violeta. Porque a los 3 minutos, Nazareno dejó atrás al defensor, llegó al fondo y envió un centro bajo que Cérica anticipó para vencer la resistencia del arquero Losada.
Unión quedó groggy. Y el equipo de nuestra ciudad no pensaba perdonarlo. Seis minutos después del 1-1, Solís volvió a filtrarse por el sector izquierdo, pero llegó al final muy apretado por el arquero en una jugada que terminó con un claro remate frontal de Núñez, quien remató alto y perdió una chance clara.
Afortunadamente, el Violeta no la lamentaría. Porque a los 11, Solís fue nuevamente desequilibrante por izquierda, se metió en el área y fue derribado en uno de sus habituales slaloms. Méndez Castro no dudó y tampoco Renso Pérez, que eligió el palo derecho del arquero y ubicó allí, en la ratonera, un balón que se hizo inatajable para Losada, quien nada pudo hacer a pesar de su gran estirada.
Con el 2-1 en el marcador, a Unión (que sumaba tres derrotas en fila) no le quedó otra que salir a buscar. Y lo hizo con más vergüenza que fútbol. Y con dos cambios que mejoraron su tenue versión. Pero Villa Dálmine se mostró firme en el fondo (buena tarea de la zaga central) y apenas si le permitió una chance clara (un desvío de De Franceso que se fue por sobre el travesaño). Incluso, a los 25 minutos, se pudo haber puesto 3-1, tras una jugada en la que Solís no encontró el espacio para rematar y terminó cediendo atrás para Núñez, cuyo disparo fue manoteado por sobre el travesaño por el arquero Losada.
Por eso, en un contexto en el que se dividían el balón a pesar de la búsqueda de Unión, el Violeta recién liquidaría el trámite a los 40 minutos, tras una gran acción de Sanabria que recortó a toda la defensa por el centro y envió un centró bajo que Alessandroni no pudo rechazar, dejándole el balón servido a Solis para que Nazareno le ponga el broche final a una noche magnífica desde lo individual.
Entonces, Rondina mandó a la cancha a Pereyra y Soriano en reemplazo de Cérica y Solis para que las decenas de simpatizantes del Viola presentes en Mar del Plata pudieran aplaudir a dos de las grandes figuras de un triunfo con muchísimo significado anímico, pero también estadístico. Porque Villa Dálmine volvió a tomar aire en la tabla de posiciones y, sobre todo, en la de los promedios, ganándole a un rival directo en ese aspecto. Porque cortó una racha de siete partidos sin victorias como visitante y porque, así, llegará con tranquilidad al partido del próximo domingo frente a Los Andes. Por eso, de "La Feliz", el Violeta retorna muy feliz.
Por: Pablo Scoccia
Síntesis del partido
UNION (1): Nahuel Losada; Jorge Peirone, Leonel Formaggioni, Braian Cucco, Ariel Seltzer; Nicolás Ramírez, Juan Pablo Manzoco, Juan Ignacio Alesandroni, Nahuel Santos; Lucas De Francesco y Wilson Albarracín. CAMBIOS: 17' ST Emmanuel Giménez x Jorge Peirone; 17' ST Orlando Caruso x Ariel Seltzer y 36' ST Brian Visser x Juan Pablo Manzoco. SUPLENTES: Angel Pedroso; Martín Quiles, Nicolás Castro y Maximiliano Planté. AMONESTADOS: Manzoco, Santos y Peirone.
VILLA DALMINE (3): Carlos Kletnicki; Juan Ferreira, Matías Valdez, Rubén Zamponi, Juan Celaya; Renso Pérez, Horacio Falcón, Diego Núñez; Matías Nouet, Ezequiel Cérica y Nazareno Solís. DT: Sergio Rondina. CAMBIOS: 23' ST Gabriel Sanabria x Matías Nouet; 42' ST Esteban Pereyra x Ezequiel Cérica y 43' ST Andrés Soriano x Nazareno Solís. SUPLENTES: Dario Barrera, Jorge Demaio, Diego Grecco y Nicolás Stefanelli. AMONESTADOS: Zamponi, Falcón y Solís.
GOLES: 9' PT Leonel Formaggioni (U); 3' ST Ezequiel Cérica (VD); 12' ST Renso Pérez (VD) -de penal- y 40' ST Nazareno Solís (VD).
ARBITRO: Gerardo Méndez Cedro
ASISTENTES: Gustavo Esquivel y Walter Lago
CAMPO DE JUEGO: José María Minella (Muy bueno)
