Guillermo Brown de Puerto Madryn 3 - Villa Dálmine 1
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| Ezequiel Cérica se apresta a cabecear la pelota que se convertiría en el descuento de Dálmine. No alcanzó. |
Situación extraña vivió ayer Villa Dálmine en Puerto Madryn: es que luego de un primer tiempo en el que le costó manejar el balón y fue superado por Guillermo Brown, mejoró en el complemento, justamente cuando el líder del campeonato logró establecer las ventajas que le dieron el triunfo por 3 a 1.
Sí: Villa Dálmine regresa del Sur con la frustración lógica por no haber podido sumar, pero con la tranquilidad de que encontró funcionamiento en la segunda mitad. ¿Por qué perdió entonces? Porque así como Guillermo Brown no pudo liquidar sus aproximaciones en la primera parte, fue todo efectividad en la segunda para aprovechar fallas defensivas del Violeta. Una situación similar, aunque a la inversa, a la que vivió el equipo de Walter Marchesi en el primer tiempo frente a Brown de Adrogué.
De esta manera, Villa Dálmine llegó a cuatro partidos sin triunfos como visitante, una racha que incluye tres derrotas (Nueva Chicago, Atlético Paraná y Guillermo Brown) y un empate (Instituto) y que comenzó luego de la gran victoria sobre San Martín en Tucumán.
Sin embargo, ahora deberá concentrarse rápidamente en Mitre y Puccini. Es que allí recibirá este miércoles a All Boys, por una nueva fecha de este parejo Nacional B, que no da tregua y obliga a la máxima concentración durante los 90 minutos.
EL PARTIDO
Sin Leonardo Carboni (sufrió una molestia en la práctica del viernes en Trelew) y con Ezequiel Cérica en reemplazo del "Mono", el DT Walter Marchesi terminó realizando tres modificaciones. Las otras dos ya estaban anunciadas: Zamponi por el lesionado Coronel y el uruguayo Alonso por el juvenil Mazzocchi.
La idea del entrenador era apostar al circuito que se podía generar desde Favalli hacia los costados, con Ruiz a la izquierda y Alonso a la derecha, antes las obligaciones que Guillermo Brown se podía autogenerar en pos de recuperar el liderazgo que le había robado momentáneamente Independiente Rivadavia de Mendoza.
Y así arrancó el juego, con Cérica sorprendiendo a espalda de los dos marcadores centrales. Sin embargo, su media vuelta salió desviada, en una acción que terminó siendo aislada, porque "Pastel" no pudo volver a ganar ese espacio.
Con el correr de los minutos, en una cancha chica, con terreno irregular y un viento cruzado que lo favorecía en la primera parte, Guillermo Brown se fue adueñando de la pelota a partir de su firmeza en la mitad de la cancha y de su capacidad para clarificar siempre el inicio de la jugada, con Rivadero y Sánchez partiendo desde el círculo central para luego encontrar a Strada por derecha o a Mosca por izquierda.
Con esos argumentos, el local creó su primera acción de peligro, a los 10 minutos, cuando una buena jugada armada por la derecha entre Strada y Flores, terminó en un centro que cabeceó Figueroa, luego rebotó en Bauman y encontró la definición de Mosca abajo del arco. Afortunadamente para el Violeta, Bauman estaba en offside y el tanto fue invalidado por Ceballos a instancias de su asistente.
Posteriormente, el elenco de Puerto Madryn volvió a llegar a los 16 y a los 26 con Mosca como protagonista, primero con un remate que le picó antes a Kletnicki y después con un peligroso centro.
Por entonces, Fede Recalde ya había recibido un golpe que, finalmente, lo obligaría a dejar el campo de juego a los 30 minutos (ingresó Fabrizio Palma en su lugar). Y tras la entrada del rosarino, el Violeta generó dos aproximaciones interesantes: primero, con un remate alto de Ruiz a los 32 y luego, a los 34, tras un desborde de Alonso por izquierda que terminó con un centro atrás que encontró al propio Palma, quien desde el borde del área disparó desviado.
La respuesta del local, que seguía manejando más y mejor el balón, fue inmediata, un minuto después, cuando Mosca le robó el balón a Alsina, desbordó y envió un centro que por centímetros no alcanzó a cabecear el goleador Figueroa.
En esos momentos, el mejor andar de Guillermo Brown se diluía sin transformarse en una clara superioridad porque Villa Dálmine mantenía la calma y no se desordenaba, aún cuando en el cierre de la primera mitad, Strada desbordó por derecha y envió un centro bajo que Rivadero punteó dos veces: en la primera, tapó Kletnicki; y en la segunda, la pelota salió pegadita al palo.
Así parecía que la igualdad le sentaba mejor al equipo de nuestra ciudad, que se ilusionaba con la desesperación del local y con poder encontrar espacios para explotar la velocidad de Alonso y Cérica. Sin embargo, el complemento encontró al Violeta con una mejor postura, con mayor tenencia del balón y mayor participación de Favalli y Ruiz, quienes prácticamente no habían incidido en la primera parte.
Entonces, comenzó a jugar a espaldas del doble 5 local y a encontrar aperturas hacia los costados. Incluso, en el arranque, Ruiz tuvo su chance, pero remató sin convicción pisando el área.
Pero en ese momento asomó el Guillermo Brown que hoy comanda el campeonato. Un equipo sólido y muy efectivo. Y en dos ataques en cinco minutos, aprovechando las ventajas que le entregó el fondo de Villa Dálmine, sacó dos goles de ventaja.
Primero, a los 5, en una acción que comenzó en un largo saque de arco, Alsina acompañó el desborde de Bauman y no le cerró la línea, por lo que el delantero pudo sacar un centro pinchado que, por el centro del área, encontró la llegada solitaria de Rivadero, quien sentenció de cabeza a Kletnicki.
Y después, a los 10, un notable quedo defensivo le permitió a Strada anticipar a Fórmica y escapar de cara a un Kletnicki que demoró en salir y quedó a mitad de camino, eludido por quien terminaría marcando el 2-0.
Sí, en apenas cinco minutos, Guillermo Brown mostraba efectividad para tomar una ventaja significativa. Y al Violeta no le quedó otra que salir a buscar el área rival, exponiéndose a la contra. Pero como dominó el terreno y el balón, fue muy superior en ese tramo. Incluso, llegó rápidamente al descuento, a los 15, con un cabezazo de Cérica en el primer palo tras un córner desde la izquierda de Favalli.
Entonces el empate no pareció lejano. Por el contrario: era Villa Dálmine el dueño del momento. A los 20, Favalli probó de media distancia. Y a los 21, Ruiz volvió a mostrar poca convicción en su remate, buscando el ángulo con rosca desde una clara posición en la media luna del área.
Marchesi también entendió que estaba mejor su equipo y que todavía podía arriesgar más: mandó a la cancha a Mazzocchi en reemplazo del amonestado Falcón y el Violeta siguió presionando, acechando el área de Andrés Mehring, aunque le faltaron variantes para profundizar con mayor peligro (se repitió con subidas anunciadas de Alsina que terminaban en centros intrascendentes).
Y con el correr de los minutos, el juego se tornó emotivo, porque se abrió definitivamente y Guillermo Brown dispuso de espacios cada vez más amplios para la contra. Incluso, el DT Gastón Esmerada apostó a liquidar el juego por esa vía con el ingreso de Giordana. Y obtuvo réditos casi inmediatos, porque dos minutos después, a los 39, el propio Giordana envió un centro bajo que cruzó toda el área y encontró la llegada de Tobías Figueroa por el segundo palo.
El 3-1 fue el final y ya no quedó tiempo para más. Sólo para el festejo de la parcialidad local, que disfruta de su equipo en lo más alto del campeonato. Del otro lado, el Violeta se fue con las manos vacías, masticando la bronca de esos errores casi consecutivos que en cinco minutos le costaron dos goles y le pusieron el partido muy cuesta arriba, justo frente al entonado líder del certamen.
Por: Pablo Scoccia
Síntesis del partido
GUILLERMO BROWN (3): Andrés Mehring; Franco Flores, Tobías Albarracín, Cristian Sain, Nicolás Dematei; Román Strada, Marcos Rivadero, Sergio Sánchez, Claudio Mosca; Jonathan Bauman y Tobías Figueroa. DT: Gastón Esmerado. CAMBIOS: 32' ST Lucas Argüello x Mosca; 37' ST Santiago Giordana x Strada y 42' ST Matías Galvaliz x Figueroa. SUPLENTES: Emanuel Bilbao, Maximiliano Pereiro, Marcos Pérez y Leonel Torres.
VILLA DALMINE (1): Carlos Kletnicki; Juan Alsina, Ángel Alonso, Rubén Zamponi, Lautaro Formica; Pablo Ruíz, Horacio Falcón, Federico Recalde, Lucas Favalli; Mauricio Alonso y Ezequiel Cérica. DT: Walter Marchesi. CAMBIOS: 29' PT Fabrizio Palma x F. Recalde; 29' ST Juan Manuel Mazzocchi x Falcón y 42' ST Diego Núñez x Favalli. SUPLENTES: Fernando Otarola, Luciano Recalde, Jorge Demaio y Jonathan Figueira.
GOLES: 5' ST Marcos Rivadero; 10' ST Román Strada; 15' ST Ezequiel Cérica y 39' ST Tobías Figueroa.
ARBITRO: Diego Ceballos
ASISTENTES: Diego Barón y Gustavo López
CAMPO DE JUEGO: Villa Dálmine (Muy bueno)
PUBLICO: 1100 personas
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